Tucumán vivió una verdadera fiesta durante el Trasmontaña

La fiesta Trasmontaña inició el viernes pasado, cuando cientos de amantes del ciclismo vibraron con el SHIMANO XCE Eliminator en el Central Tucumano del Hotel Hilton Garden Inn. Este circuito técnico que incluyó obstáculos de origen natural y artificial, contó con los mejores bikers del país y Latinoamérica que además se acercaron para disfrutar de la Expo Bici: una exposición de las empresas más importantes del rubro del MTB que ofrecieron sus productos alrededor de todo el centro comercial con importantes descuentos. El día domingo con una importante concurrencia de público se cerró la XXI edición del Rally Trasmontaña de mountain bike. El evento, que contó como siempre con el auspicio del Ente Autárquico Tucumán Turismo (EATT), organismo que conduce Bernardo Racedo Aragón, congregó a miles de personas que esperaron ansiosos en las rutas e inmediaciones de San Javier a los ciclistas que con sacrificio, sangre y sudor llegaban a la recta final de la competencia. Compitieron en las categorías máster, mayores, juveniles, sub23, damas, mixtos y padres e hijos. La largada de la prueba se realizó a las 8 de la mañana, desde la zona de la rotonda de San Javier, mientras que la llegada fue en el country de El Siambón. El Trasmontañita, por su parte, arrancó a las 9 de la mañana desde La Sala. Los ganadores de las 24 categorías del Trasmontaña recibieron el título de campeones argentinos de Rally por parejas, que otorga la Federación Argentina de Ciclismo de Montaña. “Los tucumanos estamos orgullosos del Trasmontaña porque la carrera de alguna manera representa lo que es Tucumán. Como presidente del Ente de Turismo, es un orgullo mostrar este evento deportivo, de buena calidad y con muy buenos actores que reúne una cantidad importante de bikers que desde hace 21 años recorren la montaña y la zona de Yerba Buena y que con su estadía nos dejan un fin de semana sumamente turístico”, manifestó Racedo Aragón. La competencia se desarrolló durante un fin de semana que dejó en la provincia un alto nivel de ocupación hotelera, porque además en la ciudad y en simultáneo sonaron bombos y guitarras del Festival Atahualpa, que este año convocó, como años anteriores, a las principales figuras del folklore nacional y de Tucumán.