.jpg)
En los salones del Ente Tucumán Turismo se llevó a cabo la presentación oficial del Festival de la Feria Franca. Con la presencia de autoridades locales y nacionales, se brindaron detalles de lo que serán tres días espectaculares.
Como cada año, la comuna de La Madrid se viste de fiesta para disfrutar del evento cultural y popular más importante del sur tucumano. Durante los días 16, 17 y 18 de julio, varios acontecimientos se desarrollarán en el marco del Festival de la Feria Franca: IV Encuentro de Emprendedores y Artesanos de la Economía Social, III Festival por los Derechos del Niño, Segunda Muestra de Arte Popular Madrileña y la popular Muestra y Exposición sobre la Producción Madrileña.
Con entrada libre y gratuita, y bajo el lema “Voces que dicen, manos que hacen” los tucumanos y visitantes podrán disfrutar de espectaculares shows, con la participación de grandes artistas locales y nacionales. Emilio Morales, La Yunta, Las Voces del Camino, Adolfo Nicolau, Los Cachys, Rodrigo Rodríguez, Laureano Cejas, Los Mayas, El Circo Social y muchos artistas más darán un clima de fiesta a la espera del sorteo de un automóvil cero kilómetro para los asistentes. Por su parte, Patricia Sosa será la encargada de cerrar la noche del viernes 17 de julio, mientras que el Chaqueño Palavecino deleitará a los presentes el sábado 18 de julio.
El Festival de la Feria Franca, nace en el año 1800, emparentado con la construcción del Ferrocarril Central Norte que ingresaba a la provincia de Tucumán por La Madrid desde Córdoba. La Feria Franca se constituyó en el lugar de encuentro de productores y artesanos locales para comercializar sus productos. Desde entonces y todos los jueves de cada semana se dan cita los lugareños para comerciar las artesanías en palma, cueros de cabras, los cabritos, las aves de corral, los quesos, la miel, los dulces regionales, el arrope de chañar, y otros sinfín de productos.
La Madrid encaró desde hace unos años el desafío de darle a este acontecimiento un claro perfil cultural y popular, alejado de todo sesgo comercial, tratando de convertir a esta alejada localidad del sur tucumano en el lugar de encuentro de la danza, la música, y las costumbres de su gente.