Una segunda vida para elementos desechados, reconvertidos en un proyecto turístico

Un emprendedor, en El Mollar, es pionero en construir un alojamiento turístico con elementos reciclables.

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Desde las alturas del cerro Ñuñorco situado en El Mollar, el valle y el lago deslumbran con su majestuosidad y ofrecen un lugar privilegiado para la contemplación.

Los días soleados acentúan los colores del paisaje, mientras la suave brisa trae consigo el sonido del motor de una mezcladora de construcción.
En el barrio Las Lomitas sorprende encontrar una edificación derramada en la pendiente que combina los tradicionales ladrillos a la vista junto con botellas, latas multicolores, gabinetes y monitores de computadoras, todo ello sumado a otros desechos electrónicos y piedras de la zona.

Bruno Busnelli, un asiduo voluntario de las campañas Yo Me Sumo del Ente Tucumán Turismo, es un defensor del medio ambiente y lo sustenta a través de un emprendimiento que poco a poco busca transformarse en un alojamiento para turistas que valoren una experiencia diferente.



“Desde la organización Ecoclick y junto a varias agrupaciones buscamos generar conciencia a través de la incorporación de elementos útiles para la construcción, procedentes del reciclado y la chatarra tecnológica, como también los envases PET o de vidrio”, explica el emprendedor.
Mientras coloca botellas sobre una base de mezcla para mampostería, que puede ser de tierra y cemento, Busnelli detalla lo que a poca distancia será el futuro living, hecho de monitores, y el hogar de piedras y botellas. Las habitaciones se fabrican con dos tipos de elementos: una con desechos de materiales electrónicos, como gabinetes de CPUs, y la otra con latitas de bebidas y botellas de vidrio. El resultado final, asegura, será muy vistoso y llamativo.

La posibilidad de participar está abierta
“La idea es concientizar. Pueden venir, conocer la técnica y participar de talleres para comprender que estas construcciones no tradicionales pueden convivir con las estándar, ya que tiene las mismas o mejores condiciones”, asegura entusiasmado mientras traba elementos con la mezcla.
El emprendedor considera que “se le puede dar un buen re-uso a los materiales mientras se incentiva a la gente a construir así. Queremos que la gente vea que las cosas son recursos, no basura, si las reutilizamos”.

Entre marzo y abril, y con la colaboración de quienes se suman, Busnelli calcula finalizar las dos primeras habitaciones con un baño cada una. En tanto, en un máximo de dos años, proyecta alcanzar las seis.

Como complemento, y con el objetivo de acumular más material, recorre junto a otros voluntarios el borde del lago La Angostura para realizar “Caminatas de Limpieza”.

Para sumarse a esta iniciativa, pueden contactarse con Bruno Busnelli a través del Facebook Ecoclick Conciencia Sustentable.     koko303

 

Fecha de Publicación
06-12-2018