Valle Calchaquí

Capilla de la Virgen de Covadonga (El Mollar)





Covadonga significa "Señora de la Cueva" y su culto  tiene origen en Asturias, España, a partir del siglo VIII.


Esta pequeña capilla fue construida con materiales del lugar entre 1940 y 1950. Según cuenta la historia, fue encargada por un hombre que provenía de Asturias (España) quien tras salvar su vida en un accidente, realizó a la virgen una promesa  de construir un lugar de culto en su honor en un sitio similar al de Asturias. Desde aquellas décadas, la Patrona de los Asturianos bendice el valle de Tafí.


Cada año, el segundo fin de semana de Noviembre, tiene lugar en la villa turística de El Mollar, la fiesta patronal. La fiesta se desarrolla coincidiendo con la finalización de la catequesis de preparación para la Primera Comunión y Confirmación de los niños del lugar. La procesión es precedida por gaiteros asturianos de Tucumán, de otras partes del país y de Asturias, que recorren las calles del pueblo junto a copleras, gauchos y un violinista del lugar, dándole un marco singular, emotivo y colorido a la fiesta.


Capilla Jesuítica de la Banda (Tafí del Valle)





Tras haber adquirido las tierras en 1716, los jesuitas comenzaron a organizar la estancia que ocupaba el valle de Tafí. Esta construcción fue realizada entre los años 1718 y 1720 y marcó el inicio de la población de Tafí del Valle.


Luego de la expulsión de los jesuitas en 1767 el complejo pasó a manos de tradicionales familias de Tucumán.





En el año 1972 pasó a manos del Estado y fue convertido en museo, declarado Monumento Histórico Nacional. En el mismo se exhiben objetos de las culturas Santa María y Tafí, de los Padres Jesuitas, del período virreinal y de las últimas familias propietarias. La Capilla responde a un estilo arquitectónico colonial del Siglo XVIII.


Para llegar desde la villa, se debe continuar por Ruta Provincial Nº 325 también llamada Avenida Presidente Juan Domingo Perón en dirección sur y recorrer aproximadamente 1 kilómetro hasta encontrar  la capilla y el museo.



Vida y Pasión de Dios Hombre (Tafí del Valle)





La representación de la Vida y Pasión de Dios Hombre es una obra conmovedora en un escenario de valles y cerros digno de ser conocido. La obra revive las últimas horas de Cristo y se realiza al aire libre en un entorno natural que le otorga un gran realismo a la escenificación, representada por 30 actores y más de 100 lugareños.





La obra se realiza durante Semana Santa en base a la técnica del teatro medieval de mansiones, donde los pasajes bíblicos son relatados al público que recorre los escenarios naturales.



Parroquia Nuestra Señora del Carmen (Tafí del Valle)


La parroquia dedicada a Nuestra Señora del Carmen, fue levantada por Estratón Colombres, un presbítero que vivió entre 1819 y 1901. Fue habilitada en 1895 pero con el correr del siglo XX sufrió varias reformas, la más importante data de 1970.


Se encuentra ubicada sobre Avenida Belgrano, en la villa de Tafí.



Iglesia San Ramón Nonato (Amaicha del Valle)





Esta Iglesia fue construida por el presbítero Estratón Colombres a fines de 1800 con materiales de la zona, tiene un estilo colonial y ha sido sometido a dos restauraciones. Sus techos de madera de cardón con tirantes de algarrobo amparan su única nave. El coro hecho en madera se encuentra  frente a un retablo sencillo conformado por un Cristo en la Cruz sobre un paño rojo.


El pequeño recinto se ve desbordado durante cada misa y más aún en la Fiesta patronal de San Ramón Nonato, el 31 de Agosto.


Se encuentra ubicada frente a la plaza principal de Amaicha, sobre calle Miguel Araoz.



Fiesta de la Pachamama (Amaicha del Valle)






Historia, sabores, costumbres, bailes, colores y mucho más son los componentes esenciales de la fiesta de la Pachamama. Significa una de las celebraciones más importantes para los tucumanos y un verdadero atractivo para el turista, quien experimentará de cerca las tradiciones y creencias de los habitantes de Amaicha del Valle.


Cada año, durante tres días se congregan en Amaicha miles de adoradores de la Madre Tierra, esa fecunda naturaleza que hace germinar las semillas y madurar los frutos. El ambiente de la fiesta es tan rústico como el del pueblo y sus habitantes.





En esta celebración se elige a la Pachamama (privilegio al que acceden sólo las mujeres de mayor edad), que es montada en un trono de piedra cubierto con ponchos o en una carroza adornada, y la acompaña el Yastay (padre de los animales), el Pujillay (el Diablo) y la Ñusta (joven que representa los frutos de la tierra).


El ambiente se impregna de color con el desfile de carrozas adornadas con guirnaldas y reveladoras de la ingenua y fértil imaginación de los vallistos.